¿Cuál es la diferencia entre la termografía y la infrarroja?

A medida que se acerca la temporada de caza, tanto los aficionados como los profesionales se preparan con la última tecnología para mejorar su experiencia. Entre los avances más innovadores se encuentran las imágenes térmicas e infrarrojas, dos herramientas distintas pero igualmente valiosas para el cazador moderno. Esta guía analizará en profundidad las diferencias entre las imágenes térmicas y las infrarrojas para ayudarle a decidir cuál es la mejor para sus necesidades de caza.

Entendiendo la termografía:
La termografía es un elemento innovador en el ámbito de la caza nocturna, la vigilancia y la búsqueda y el rescate. A diferencia de la visión nocturna tradicional, que requiere algún tipo de iluminación, la termografía detecta las señales de calor emitidas por todos los seres vivos. Esto permite una visibilidad clara en la oscuridad total y la capacidad de ver a través de obstrucciones ambientales como la niebla y el follaje claro. Con visores térmicos de alta gama, los cazadores pueden detectar señales de calor a varios cientos de metros de distancia, lo que les da una ventaja sin precedentes para detectar presas a grandes distancias.

Los beneficios de la visión infrarroja:
La visión infrarroja, que se suele representar en los medios a través de gafas de visión nocturna, funciona según un principio diferente. Capta y amplifica las ondas de luz débiles del espectro infrarrojo cercano que son invisibles a simple vista. Esta tecnología se basa en fuentes de luz ambiental, como la luz de la luna y de las estrellas, para crear una imagen teñida de verde que mejora la visibilidad en condiciones de poca luz. Las cámaras de caza infrarrojas no solo son más asequibles que sus homólogas térmicas, sino que también proporcionan imágenes de alta calidad, lo que permite a los cazadores ver todo lo que les rodea, ya sea que produzca calor o no.
